Por Leonardo Plata

SANTO DOMINGO; Los apagones, carestía de los alimentos de primera necesidad y a la ola de delincuencia abren sus fases para tragarse a los dominicanos sin misericordia.

El regreso de los apagones, obligó al presidente Luís Abinader a destituir al gerente general de Edeeste, por las constantes huelgas y quejas en esa demarcación.

Los constantes aumento se precios de los artículos que conforman la canasta básica, es unos de pos principales dolores de cabezas para la mayoría de la población, la cual no aguanta más presión de parte del gobierno.

Otros de los principales problemas es la delincuencia la cual luce cada día más incontrolable y parece adueñarse de todo el territorio nacional, con una ola de robos, asaltos, sacariato y venta de sustancias controladas.

Estos componentes mantienen de rodillas a los ciudadanos, ante la falta de políticas públicas y sociales enfocadas de parte del gobierno central para enfrentar estos males social que merman la calidad de vida de los dominicanos.